(239 pág.; Anagrama) (54; agosto de 2022, en Fitero)
Este libro fue el elegido por Josep M. para este mes y
con él se acaba la quinta vuelta. Este también hubiera podido ser uno de los
elegidos por mí, pues cada año releo un par de libros que hube leído cuando era
muy joven (ahora, parece ser, que aún soy joven) y, entonces, Sharpe era un
autor en el que podías confiar en echar unas risas leyéndolo o comentando con
alguien que también lo hubiera leído. Entonces.
Ahora, más de treinta años después y ni siquiera diez
años después de la muerte de este autor, solo aconsejaría su lectura a alguien
joven de verdad, que no lo hubiera leído, pues en caso contrario, el mío, me ha
parecido soso y traído por los pelos, aunque no le quito el trasfondo de
crítica que pueda haber.
La historia, con cuatro personajes mal contados, explica
que un college de Cambridge vive de donativos de los padres por aceptar hijos
que no lo han sido en otros y de vender los títulos oportunos a estos mismos
alumnos cuando terminan sus estudios. El problema es que ha entrado un nuevo
master, el equivalente a nuestro rector, y quiere cambiar muchas cosas, pero
del decano para abajo no quieren que nada cambie y ahí está el busilis.
“Fue
una gran fiesta.”