domingo, 27 de octubre de 2013

Jaume Cabré: Senyoria (**/***)

(415 pág.; Les Eines)                                     (63; octubre de 2013)
Como me gustó mucho Jo confesso Anna me regaló para mi cumpleaños este libro que ya había leído Marisol (¡qué suerte tengo!) y ahora le ha llegado su turno. Una advertencia: en la edición de la imagen hay un prólogo de la señora Roser Trilla que tiene a bien desentrañar la historia en la página 21. El autor tarda 400 páginas, pero ella (y la editorial) quiere adelantársele. Cuando tenga un rato escribiré a la editorial sugiriendo que no haya prefacios de este tipo: al final del libro también se pueden leer.
Esta novela está escrita de forma mucho más desenvuelta que la primera que leí de él, es más ágil, con repeticiones de adjetivos o sustantivos o frases completas, como gastando una broma al lector o queriendo decirle “vaya personaje más pelma”, incluso haciendo juegos de palabras con los nombre y apellidos de los personajes (esto último de forma muy jocosa). No obstante, utiliza un lenguaje culto y, para alguien cuya lengua materna no es el catalán y no tiene un diccionario a mano, muy culto. Me sabe mal que el diccionario catalán de Amazon no tenga buenas críticas, pues lo habría usado bastante a menudo. Da gusto leer un libro que te enseña tanto vocabulario, otra cosa es la memoria…
En este libro Cabré también juega con el tiempo (no indicaré cómo, para no ser como la prologuista) y entre los motivos que puedo indicar para inducir a su lectura está la documentada forma de vida de finales del siglo XVIII, la descripción de la Barcelona de esa época, la idea que ha tenido el autor con una carta de vital importancia y que pasa de mano en mano; en fin, para que entretener al que lea estas líneas si lo que ya desea es empezar a leer este buen libro.
Como no cabe un resumen, sólo diré que su título podría ser Senyoria o de l’arbre caigut tothom en fa llenya.




“«La constel·lació d’Orió té el privilegi de ser considerada la més bella del firmament.”

eBook: perfecto.                                            Amazon


sábado, 26 de octubre de 2013

Ramón J. Sender: Réquiem por un campesino español (***)

(105 pág.; Destino)                                        (62; octubre de 2013)
Tengo el libro, pero encontré una edición en .pdf con el prólogo de Enrique Mújica que, como ya viene siendo tradicional, se preocupa de que el lector ya sepa qué va a ocurrir en la historia antes de que esta dé comienzo. ¿Por qué lo permiten las editoriales y los autores? No lo comprendo.
Dejémoslo estar, pero aconsejo vehementemente que no se sepa nada de lo que nos quiere contar Sender antes de que este nos lo cuente a su manera y ritmo: no tiene desperdicio. ¡Qué cien páginas más buenas! ¿Lo conocía García Márquez antes de escribir su impresionante Crónica de una muerte anunciada?, pues alguna idea le pudo haber dado.

Qué se puede explicar del libro: a partir del título y de las primeras páginas sabemos que se va a ofrecer un réquiem por la muerte de un campesino y el cura oficiante es el que bautizó y dio la comunión a este hombre. Y las cien páginas pasan volando y cuando llegas al final piensas que para crear una obra maestra no hacen falta ni cientos ni miles de páginas, sino una buena idea y saber explicarla muy bien. Y esta lo hace más que sobradamente.




“El cura esperaba sentado en un sillón con la cabeza inclinada sobre la casulla de los oficios de réquiem

eBook: con algunas faltas y el título, el autor y el número de página entre el texto (proviene de un pdf.)                                            http://www.quedelibros.com/


sábado, 19 de octubre de 2013

Herman Koch: La cena (**/***)

(288 pág.; eBook)                                          (61; octubre de 2013)
Aconsejado por Marisol y sin decirme nada del contenido de la novela, que es lo mismo que voy a intentar hacer yo, empiezo a leer este libro y me troncho, sigo leyendo y me río, pero cuando llegamos al segundo plato la risas han desaparecido hace rato. Esto lo digo como aviso.
Y ahora lo que puedo explicar sin dar a conocer el nudo: dos parejas quedan a cenar en un restaurante de alto nivel en Holanda y el narrador, que es el primero en llegar, lo critica absolutamente todo, con pensamientos como los que cualquier persona de la calle podría tener cuando ve que el filete con patatas que ha pedido está en el centro de un plato del tamaño de una plaza de toros en el que las delicadas bolitas de patata cubren las finas hebras de carne. Hasta aquí puedo explicar y hasta aquí te reirás.
La historia está bien desarrollada y va apareciendo muy poco a poco, sutilmente, y es por eso que dudé en calificarla de aconsejable o muy recomendable. Al final me quedo con esta calificación, a pesar de que, al principio, algún lector pueda pensar que es un relato irónico sobre el mundo actual y la cocina fantasiosa y se encuentre con un relato que sí habla del mundo en el que nos encontramos, pero en el que ya no hay lugar para la fantasía, ni en la cocina ni en la sociedad. Caín sigue entre nosotros y ya lo dijo bien claro: no es el guardián de su hermano.




Íbamos a cenar en un restaurante.”

eBook: perfecto.                                            Amazon


domingo, 13 de octubre de 2013

J.D. Salinger: El guardián entre el centeno (***)

(228 pág.; Alianza)                                        (60; octubre 2013)
Recuerdo que algún tiempo antes de morir Salinger le fue tomada una foto saliendo de un establecimiento: se ve la cara de un hombre ya mayor con un visaje rabioso y la mano adelantada intentando atrapar la cámara que lo atrapaba a su vez. No sé si la novela es autobiográfica, pero mientras la leía recordaba la única foto que conocía de él.
Un joven de buena familia, que está a punto de cumplir los dieciséis años, es expulsado de su cuarto colegio poco antes de las fiestas navideñas. Como su familia no lo espera hasta dentro de tres o cuatro días más tarde, decide pasarlos en un hotel de Nueva York en compañía de alguno de sus conocidos.
La novela está escrita en primera persona y no hay suceso, conversación o personaje que aparezca en ella que no se lleve un comentario mordaz, despectivo o, cuando menos, crítico; pero razonado desde el punto de vista de un adolescente de dieciséis años ya desencantado de su, o la, vida. Lo que ocasiona alguna sonrisa en el lector, porque ¿cuántas veces no hemos pensado alguna cosa que la edad nos ha aconsejado no expresarla en voz alta, pero que era de ese tenor?
A mí me parecía divertida, pero a Marisol no le había gustado por lo triste que es. Pero es que lo que le va sucediendo al muchacho, que acaba de salir del cascarón, pero el dinero que tiene le permite asomarse a la vida adulta, muestra a una persona sola que busca compañía y que lo que más desea es estar con su hermana menor a la que no deja de ponderarle su gracia e inteligencia.
En resumen, una excelente novela que se lee con ganas de no dejarla hasta llegar al final de la misma y lamentando que se acabe tan pronto. Para muestra, el botón inicial que figura abajo.




“Si de verdad les interesa lo que voy a contarles, lo primero que querrán saber es dónde nací, cómo fue todo ese rollo de mi infancia, qué hacían mis padres antes de tenerme a mí, y demás puñetas estilo David Copperfield, pero no tengo ganas de contarles nada de eso.”

eBook: perfecto.                                            Calibre 1.0.0


sábado, 12 de octubre de 2013

Ruth Rendell: Algunos mienten, otros mueren (*/**)

(267 pág.; Plaza & Janés)                              (59; octubre de 2013)
Cuando vi la película de Almodóvar Carne trémula me enteré que estaba basada en una novela de esta autora y como tenemos una docena de sus libros le dije a Marisol que tenía ganas de leerla. No es buena, fue su respuesta. De eso han pasado unos cuantos años y como nuevamente quería leer un libro de la estantería donde están los suyos he elegido otro. No es bueno, es lo que yo digo.
Hace muchos años, pero muchos, en los medios de transporte públicos veías a los hombres leer unas novelitas del tamaño de un bolsillo. Esta autora es de ese tamaño, es decir, novelas que posiblemente se tarde unos días en escribir si te ganas la vida con ello y eres lo suficientemente imaginativo como lo eran los autores españoles que vivían gracias a esas bolsinovelas.
Como no tengo muchas granas de escribir un párrafo resumiendo el argumento, diré que es un diccionario de botánica, por la cantidad de nombres de especies vegetales que se mencionan y que, es mi parecer, no puede ser muy buena una novela de misterio en la que los dos últimos capítulos se destinan a que un personaje nos explique todo lo que ha sucedido en el presente como en tiempos pretéritos al inicio de la acción. Resumiendo, en mi próxima vida leeré Carne trémula, pues aún resultará que es mejor que esta.




“–Pero ¿por qué aquí?”
eBook: correcto.                                            http://www.quedelibros.com/


domingo, 6 de octubre de 2013

Adolfo Bioy Casares: El sueño de los héroes (**)

(182 pág.; eBook)                                          (58; octubre de 2013)
Un joven de 21 años va a cortarse el cabello y el peluquero le dice que apueste por un caballo. Le hace caso y gana mil pesos, por lo que invita a sus amigos y a un adulto que tienen como modelo a seguir. Son tres días y sus noches de juerga durante el carnaval de las que el protagonista sólo recuerda dos. En los tres años siguientes se ha casado, afianzado en su trabajo, pero no ha olvidado ni a la chica que conoció en aquellos días de carnaval, ni ha perdido su ansia por saber qué sucedió el tercer día, del que nada recuerda.
Vuelve a ser carnaval, vuelve a cortarse el pelo y le pide al peluquero un nombre de caballo. Apuesta por él y gana más de mil quinientos pesos. Se debate entre el deber de aportarlos a la economía familiar o de poder repetir aquella jarana, tal y como fue realizada, a fin de saber finalmente que pasó el tercer día. Se decide por invitar a sus amigos y al adulto y repiten en la medida de lo posible lo que hicieron los dos primeros días y, casualidades de la vida, reconoce a la chica que conoció tres años atrás. Al fin sabrá lo que les pasó el tercer día de carnaval… y tú también si lees sus menos de doscientas páginas.
Tiene un estupendo final, con dos escenas escalofriantes, pero, y a pesar de ser una novela corta, quizá se hace un poco lenta en ciertos momentos en los que va describiendo la vida habitual de los protagonistas. Aunque no la considero muy recomendable, pues a más de uno puede cansarle, después de haberla leído creo que vale la pena por ese largo final tan bueno.




A lo largo de tres días y de tres noches del carnaval de 1927 la vida de Emilio Gauna logró su primera y misteriosa culminación.”

eBook: con el nombre del autor y el número de la página, y demasiadas líneas sueltas. Incómodo.                              http://www.4shared.com/


sábado, 5 de octubre de 2013

Ayn Ránd: El Manantial (**/***)

(822 pág.; Círculo de Lectores)                     (57; septiembre de 2013)

El conocimiento de la película y el haberla visto hacía poco (a pesar de que no me pareció buena) hizo que tuviera más ganas de leer el libro por ver si era tan insulso como lo que se ve en pantalla. Y no es que sea así, aunque durante buena parte de las ochocientas páginas puedas estar pensando eso mismo.
Me explico: un joven es expulsado de la carrera de arquitectura y le parece natural, pues no aprende nada que le interese; a pesar de ello decide ser arquitecto y, aunque no se gana la vida, malvive hasta que consigue su primer encargo. Es un diseño tan particular, tan poco visto, tan fuera de los cánones establecidos, que los dos conocidos que tiene le dicen que lo deje y los desconocidos lo vilipendian. Pero el no ceja y persigue su ideal. Y, al margen de alguna otra historia que va explicando la novela, nos pasamos cuatrocientas páginas con un protagonista parco en palabras, y por eso podría ser calificada de insulsa esta historia.
Pero es que hay más: la autora sostiene, y este es su libro bandera, que el individualismo es lo que debe promoverse y que la sociedad como grupo no es mejor que como individuos separados cada uno de ellos luchando por sus ideas. El personaje principal es el alter ego de la autora que, a pesar de ser rusa, se hizo a sí misma al más típico estilo norteamericano, adquiriendo dicha nacionalidad y ensalzando su forma de vida.

Por último hacer un comentario, ahora que están tan de moda las “sombras de los grises” (el traductor diría: juego de palabras intraducible, es decir, piensa en un título en inglés): el libro tiene cuatro capítulos, cuyos título son: Peter Keating, Ellsworth M. Toohey, Gail Wynand, Howard Roark; faltaría el de la mujer que une a esos cuatro personajes. La manera en que se entrega a los hombres, en una novela escrita hace setenta años, supongo que haría palidecer aún más al señor Gris.



“Howark Roark se echó a reír.”

eBook: perfecto.                                            http://epubgratis.me/