sábado, 29 de octubre de 2016

Miguel de Cervantes Saavedra: La Galatea (*/**)

(372 pág.; Grieta)                                          (68; octubre de 2016)
Con muchas ganas empiezo un nuevo libro de Cervantes, pero a medida que voy leyendo cada vez me cuesta más, pues todo él habla de amores o desamores entre pastores y pastoras de diversos pueblos. Está escrito en prosa, pero cualquier excusa sirve para que haya páginas y páginas seguidas de poemas y canciones o explicaciones rimadas en boca de cualquier personaje, es decir, son más ilustrados que cualquier licenciado en literatura.
Los nombres de ellos son los más extraños que he leído nunca, por ejemplo: Galatea, Artrando, Briseno, Erastro, Larsileo y así hasta el infinito. Cuando había leído más de la mitad me encontré con dos poemas de unas veinte páginas cada uno y decidí que leería solo la prosa para saber en qué acababa tanta historia pastoril… y a continuación de los poemas venían monólogos de la misma extensión. No tuve fuerzas para seguir.
Si antes me parecía raro encontrar a alguien que hubiera leído el Quijote, ahora me parece imposible que, salvo un académico, alguien haya leído motu proprio esta obra y, sobre todo, la haya acabado.




“Mientras que al triste, lamentable acento
del mal acorde son del canto mío,
en eco amarga de cansado aliento,
responde el monte, el prado, el llano, el río,
demos al sordo y presuroso viento
las quejas que del pecho ardiente y frío
salen a mi pesar, pidiendo en vano
ayuda al río, al monte, al prado, al llano.”

eBook: amazon


domingo, 16 de octubre de 2016

Isak Dinesen: Vengadoras angelicales (**)

(390 pág.; Afaguara)                                     (67; octubre de 2016)
La baronesa Karen Blixen-Finecke tenía “alemanes en el jardín y judíos en la cocina” por lo que se dedicó a escribir una novela, su única novela.
Con un tono decimonónico, acorde con el momento en que sucede la historia, se nos cuentan las desgracias de dos compañeras de colegio de dieciocho años que se ven abocadas a tener que buscarse la vida sin más ayuda que la una con la otra. Hacia la mitad de la novela se va viendo que van a tener grandes problemas y la novela se convierte en una de misterio, pero cuando llega la hora de desenredar la madeja, la autora se hace un lío y lo resuelve como Alejandro, con lo que uno se queda pasmado.
Como autora de relatos tuvo éxito, pues algunos de ellos se han llevado a la gran pantalla, así que, de aquí a algunos años, buscaremos otro libro de ella.




“Una noche de primavera, una muchacha llamada Lucan Bellenden se encontraba ensimismada junto a la ventana de una enorme y preciosa casa de campo inglesa.”


domingo, 9 de octubre de 2016

Johann W. von Goethe: Fausto (***)

(440 pág.; Cátedra)                                       (66; octubre de 2016)
Con un solo libro entre este y Divina Comedia vuelvo a leer sobre las cosas divinas y maléficas que sufren los hombres, debido a la casualidad entre el orden de los libros a leer y los que me regalan: este fue de Anna por mi cumpleaños. Ahora no habrá cosecha hasta Navidad o Reyes.
Esta edición en prosa de la portada que aparece más abajo, de la que he leído las cien páginas de la introducción, contiene los dos Fausto que escribió Goethe: el primero de ellos a sus jóvenes 22 años, y el segundo que acabó poco antes de morir… 60 años después. Me gusta la ópera, y mucho Fausto de Gounod y Mefistófele de Boito (vaya usted a saber la razón), por lo que ya desde hace años tenía ganas de leer el origen de ambas, pero la lista de libros es tan larga que todos tardan una eternidad en llegar a mis manos. Pero este ya ha caído.
La edición que he leído es en verso y debida a la habilidad de Helena Cortés Gabaudan y, como he hojeado la del libro, creo que es más interesante leerla rimada (la única pega al eBook gratuito que encontré es que le faltan las más de ochocientas notas al pie, pero que yo he sustituido por las que hay en el libro, pues sin ellas es bastante incomprensible mucho de lo que acontece o la razón a qué es debido, aunque sin llegar a la obra de Dante).
La primera parte de Fausto es la conocida y representada en el teatro: el trato con el diablo, el amor por Margarita y el inesperado final que no explico. La segunda parte sólo la aconsejo a quien le haya gustado mucho la primera y que tenga ganas de encontrarse con cinco actos que no tienen nada que ver con el primer Fausto y ni siquiera entre ellos. En cualquier caso, una obra imprescindible.




“Dedicatoria: De nuevo os acercáis, vagas figuras que allá en los días de mi juventud os mostrasteis ya a mi turbada vista.”


domingo, 2 de octubre de 2016

Adolfo Bioy Casares & Jorge L. Borges: Los mejores cuentos policiales - 2 (**/***)

            (239 pág.; Alianza)                                        (65; septiembre de 2016)
            Este segundo volumen de la selección de Bioy y Borges me ha parecido mucho mejor que el primero que leí hace más de seis años. Son imaginativos, ingeniosos, sorprendentes y con mucha calidad. ¡Hasta me ha gustado el de Conan Doyle! Los cuatro últimos relatos son de escritores argentinos y no tienen nada que envidiar a los autores anglosajones. Interesante descubrimiento.

            A resaltar el de Ellery Queen por lo malo que es. ¿Qué hace aquí?




“Un joven, cuyo oficio era el de vendedor ambulante de tabaco, viajaba de Morristown, donde había realizado amplias transacciones con el diácono de la colonia de los "tembladores", hacia la aldea de Parker's Falls, sobre el Salmon River.”
La muerte repetida     (Nathaniel Hawthorne)