domingo, 30 de abril de 2023

Natalia Ginzburg: Léxico Familiar (*/**)

(131 leídas de 272 pág.; )                  (28; abril de 2023)

Inmerso como estoy en intentar escribir algo de corte biográfico, que aún no es momento de precisar, Jesica me aconseja que lea este libro en cuanto a que es auto ficción, aunque ya me advierte de que no lo termine. Lo empiezo a leer, me fijo en la voz narrativa (que es la que me gustaría emplear si yo narrase algo así), y no me desagrada.

Cien páginas más tarde, estoy cansado de ese padre gruñón que, siempre que abre la boca, su hija pone el comentario entre admiraciones debido a que, más que hablar, grazna. Estoy cansado de los hechos anodinos de su familia y, por lo único que lo seguiría leyendo, es por las muchas relaciones que tuvieron con personas tan conocidas del mundo del arte, la política o la ciencia.

Tenía razón, Jesica, por lo que yo también lo aconsejo a aquel que quiera leer un libro de auto ficción. (Marisol leyó otro libro de esta autora y tampoco le gustó).





“Cuando yo era pequeña y vivía en casa de mis padres, si mis hermanos o yo volcábamos un vaso encima del mantel o se nos caía un cuchillo, mi padre [Giuseppe Levi] tronaba: «¡No hagáis groserías!»”.



viernes, 28 de abril de 2023

Cormac McCarthy: La carretera (**/***)

(209 pág.; Debolsillo)             (27; abril de 2023)

Este es el libro para este mes que nos encarga Rosa M. que leamos y, de propina, que veamos la película. Como no es largo me dedico el sábado y el domingo a su lectura y a escribir lo que sugiere el documento Pautas de lectura. Una panzada. Ya me lo había advertido Rosa M., pero…

Tres días después, Ana, Daniel, Harold, Jesica y Paco vienen a casa a ver la película. Nos lo pasamos muy bien, pero no fue por ver lo que la portada del libro muestra y que es constante en toda al película. Otro hartazgo.

Leyendo el libro se pasa más frío que viendo la película, pero esta refleja muy bien toda la sensación de soledad, atmósfera gris y destrucción que se describe en el libro. El tener que leerlo fijándome en cuestiones literarias me ha servido para apreciarlo más que la primera vez que lo leí:

https://autobiografialectora.blogspot.com/2016/05/cormac-mccarthy-la-carretera.html





“Al despertar en el bosque en medio del frío y la oscuridad nocturnos había alargado la mano para tocar al niño que dormía a su lado”.



domingo, 23 de abril de 2023

Gabriel García Márquez: Todos los cuentos (***)

(298 + 131 pág.; Círculo de Lectores)  (26; abril de 2023)  (Premio Nobel 1982)

Este es el autor mejor valorado que tengo en estos momentos así que, después de cada diez libros, leeré uno de los suyos. Este es el primero de la serie. En el libro cuya imagen aparece a continuación están los tres primeros libros de cuentos que publicó. Pero en el archivo digital que bajé también está el cuarto: Doce cuentos peregrinos. Este último me lo elogió mucho Jesica (curso de narrativa) y, para mí, es el mejor.

El primero de los libros trata mayormente de la muerte y no es el García Márquez que pueda conocer un lector, por lo que mi consejo es dejarlo para el final. El segundo libro es el de la Mamá Grande, donde ya aparece el escritor de la realidad mágica, con un entierro digno de su pluma. En el tercero, la Cándida Eréndira, aparece la otra cara de G. Márquez y es dolorosamente triste, pero con la belleza tan característica de su autor.

El cuentista peregrino trenzó sus mejores palabras en su cuarto libro, más próximo a los latinos mediterráneos en tiempo y en espacio. De entre los doce he escogido el inicio de la señorita Prazeres porque me gusta el García Márquez procaz, el que no duda en utilizar una palabra, que considero malsonante, pero que se ciñe a lo que representa ese conjunto de signos. Qué suerte tengo.





“El hombre de la agencia funeraria llegó tan puntual, que María dos Prazeres estaba todavía en bata de baño y con la cabeza llena de tubos lanzadores, y apenas si tuvo tiempo de ponerse una rosa roja en la oreja para no parecer tan indeseable como se sentía”.

María dos Prazeres



viernes, 21 de abril de 2023

Isaac Asimov: Fundación e Imperio (**)

(252 pág.; Bruguera)              (25; marzo de 2023)

Cuarto libro que leo de Asimov y, cinco años después, el segundo de la saga Fundación. Este segundo volumen no me ha gustado tanto, ni de lejos, como el primero; quizá ya no es novedad, pero yo creo, más bien, que ha sido el enfoque general de la historia, más basado en un extraño personaje que no se nos desvela hasta el final y que es buscado por todos los rincones del imperio.

El personaje en cuestión, que está en boca de todos pues está conquistando planetas sin disparar un solo tiro, tiene un apodo y así es como aparece a lo largo de la novela: el Mulo. La Fundación, a pesar de lo que su fundador tenía establecido, parece ser que será engullida por el Imperio aunque, para limitar el periodo del caos, ha concebido una Segunda Fundación, en un planeta muy alejado del centro a fin de protegerlo.

Así es como se llama el siguiente libro que leeré de Asimov…de aquí a mucho tiempo, porque la lista de libros a leer tiene dimensiones siderales.





“Bel Riose viajaba sin escolta, lo cual no estaba prescrito por la etiqueta de la corte para el jefe de una flota estacionada en un sistema estelar, todavía arisco, en las lindes del Imperio Galáctico”.



domingo, 16 de abril de 2023

Luis Martín-Santos: Tiempo de silencio (**/***)

(318 pág.; El País)                   (24; marzo de 2023)

Rafael Reig recomienda este libro en La cadena trófica y en el curso de narrativa hemos leído unos párrafos, por lo que lo anoté y leído queda. Pero no es de lectura fácil, pues hay capítulos que no se llegan a entender bien, o del todo, por la forma de narrarlos o por el léxico utilizado. En cualquier caso, si se consiguen leer, la historia es muy buena.

Entre las muchas cosas que suceden en ella, comienza sonando un teléfono en un laboratorio donde trabajan con unas ratas importadas de Estados Unidos que las utilizan para ver si pueden evitar un cáncer que padecerán todas ellas. En el laboratorio esas ratas no se reproducen por lo que deberán importar más, pero el ayudante del personaje principal le dice que a su cuñado, que vive con su mujer y dos hijas en una chabola, sí se le reproducen. El científico le dice que serán otro tipo de ratas y su ayudante le confirma que no, que son las mismas, pues él les dio una pareja para que, cuando hicieran falta, se las vendieran al laboratorio. Si esto no es suficiente astracanada, el viaje a la chabola del cuñado y la aparición de personajes secundarios hacen que la historia sea impredecible.





“Sonaba el teléfono y he oído el timbre”.



viernes, 14 de abril de 2023

The Paris Review: Entrevistas - VI (***)

(346 pág.; Acantilado)                        (23; marzo de 2023)

Segunda parte del segundo libro de estas entrevistas: en la estupenda tónica de las anteriores.

Claude Simon: Manifiesta su devoción por Dostoievski, Conrad, Joyce, Proust y Faulkner, cuyo uso vibrante y evocador del lenguaje es una de sus fuentes de inspiración.

Don DeLillo: “Palabras en un papel, eso es todo lo que necesita [un escritor joven] para distanciarse de las fuerzas que lo rodean, las calles, la gente, las presiones y los sentimientos”.

Toni Morrison: “Es difícil describir el sexo porque nunca resulta suficientemente sexy. La única forma de escribir sobre el tema es no escribir demasiado, dejar que el lector proyecte su propia sexualidad”.

Ives Bonnefoy: “Poeta es una palabra que solo se puede usar cuando hablas de otro a quien admiras. Cuando alguien me pregunta a qué me dedico, contesto que soy crítico o historiador”.

Czeslaw Milosz: “El poeta es como un ratón metido en un queso enorme y emocionado por todo el queso que podrá comer”.

Primo Levi: “Se siguen discutiendo los mismos problemas que discutía Platón. No se termina de llegar a un acuerdo acerca de qué significa ser, existir, de si el alma es inmortal o no. Y con las ciencias naturales pasa lo contrario: cualquier idea se puede demostrar o refutar”.

Ted Hughes: “Me pregunto si la mayoría de escritores no tienen la impresión de que cada vez que se proponen dar un nuevo paso los refrena inconscientemente la reacción que imaginan en los lectores o incluso, conscientemente, la que anticipan en sus colegas”.

Patrick O’Brien: “Los diálogos se me siguen ocurriendo, por lo general, sobre las tres de la mañana, pero ya no trato de anotarlos”.

P.D. James: “Soy feminista en el sentido de que quiero un trato más justo para las mujeres, igualdad de oportunidades, igualdad salarial, una sociedad más justa. Pero me da la sensación de que algunas feministas radicales de hoy en día están en contra de los hombres y no les gusta ser mujeres”.

George Steiner: “En aquella época, muy pocos sabían lo que había pasado en Auschwitz. Sí, había algunos cabrones que lo sabían, había unos cuantos hijos de puta que lo sabían y no se lo creían, pero eran muy pocos. El secretismo de los nazis tuvo una eficacia increíble”.

Susan Sontag: “Tenía el título. No soy capaz de escribir un libro si no sé cual es el título. Tenía la dedicatoria. Tenía la cita de Cosí fan tutte. Y, por supuesto, tenía la trama a grandes rasgos, así como la longitud aproximada del libro”.






domingo, 9 de abril de 2023

Woody Allen: Gravedad cero (*)

(leídas 55 de 248 pág.; Alianza)                     (22; marzo de 2023)

Montse vino por Navidad a casa y tuvo la amabilidad de regalarme este libro. Me alegré mucho por lo primero y deposité esperanzas en que el libro me gustara. No deben ir derramándose por ahí, sin ningún cuidado, pues no son infinitas.

La prologuista, que se declara fan del autor, declara que es único y yo estoy de acuerdo con ella y, además, me alegro de que así sea. Es como la suegra: basta con una. Allen sigue haciendo bromas que solo entiende él y que solo a él le hacen gracia. Sigue haciendo chistes intelectuales y buscando un nombre y un apellido al que clavarle el muerto. También tiene otro tipo de historias, para el pueblo más llano, como la de la vaca asesina, pero el resultado es el mismo: solo pueden hacerle gracia a él.

En fin, cuando llevaba un poco menos de la cuarta parte (tres historias) decidí que ya le había dedicado más tiempo del que merecía. Si las dos líneas después de la portada te hacen gracia, dímelo y te envío el libro digitalizado. (Woody, tú no cuentas).





“Cualquiera que alguna vez haya arrojado una cerilla encendida a la bodega de un buque cargado de municiones confirmará que el gesto más pequeño puede provocar una gran cantidad de decibelios”.

No puedes volver a casa… y he aquí el motivo



viernes, 7 de abril de 2023

Alberto Méndez: Los girasoles ciegos (***)

(155 pág.; Anagrama)            (21; marzo de 2023)

Por los cincuenta años de Anagrama, si comprabas dos o tres libros, te regalaban uno y elegí este. De eso hace ya cuatro años. Pero bien está lo que bien acaba, y mucho mejor si el libro leído es tan bueno como este. Es el único libro de Alberto Méndez y ganó el Nacional de narrativa al año siguiente de su fallecimiento. ¡Qué lástima! La de libros que se le quedaron en el tintero.

Son cuatro historias relacionadas, porque en cada una de ellas aparece un personaje principal de otra historia como secundario en la siguiente. Son historias muy bellas, muy tristes y muy duras, mucho. Pero vale la pena su lectura. No es fácil, en menos de doscientas páginas, conseguir que el lector, a pesar de lo duro de la historia, disfrute con la belleza de lo narrado. Pocos libros pueden causar la sensación que provoca este. La imprenta los cría y ellos se juntan (Chacón/Méndez).





“Ahora sabemos que el capitán Alegría eligió su propia muerte a ciegas, sin mirar el rostro furibundo del futuro que aguarda a las vidas trazadas al contrario”.

Primera derrota: 1939 o Si el corazón pensara dejaría de latir




domingo, 2 de abril de 2023

Henryk Ibsen: Brand (**)

(171 pág.; Literaria)               (19; marzo de 2023)

Esta obra de teatro, quizá es la más dura y difícil de leer (y de llevar a la escena) de las que he leído de Ibsen. Estuve a punto de dejarla porque el tema de la religión, y desde el punto de vista de un iluminado, no es de lo que más me interesa. Pero no abandoné y puedo decir que es un Ibsen desde el principio hasta el fin. La dificultad de ponerla en escena es que salen muchos comparsas representado al pueblo y que la acción transcurre en las montañas.

Brand, el sujeto que aparece en la portada del libro, cree que tiene la misión de convencer a la gente de que no se debe tener nada, que lo que uno tiene lo ha de dar y eso, quizá, permita entrar en la gloria. Dada su creencia, cuando su madre pide por él estando a punto de morir, él exige que se desprenda de todos sus ahorros, no solo de la mitad, ni de las tres cuartas partes, como ella le ofrece, sino de todo, a pesar de que vaya a ser para él, o precisamente por eso.

A su mujer le exige mucho más que lo que le ha pedido a su madre, pero eso tendrá que descubrirse leyendo o viendo la obra de teatro. Novena obra que leo de él y cambio de tercio.





“CAMPESINO.-   ¡Eh, extranjero!”.