(232 pág.; Tusquets) (4; enero de 2018)
Regalé este libro a un compañero del trabajo que cada
semana corre alguna carrera, desde 5 km hasta maratones, y pensé que algún día
lo leería, así que lo busqué digitalizado. Aunque el título no deja lugar a
dudas de lo que va el libro y, por consiguiente, muchos lectores pueden creer
que no les interesa, he de aclarar que Murakami aprovecha su gusto por correr
para explicarnos qué piensa sobre algunas cosas, qué hace, también para
hablarnos de sus viajes y sus aficiones y, obviamente, de cómo le ha ido en
algunas de sus carreras. Para no explicar al tuntún lo que él hace
ordenadamente, solo diré que recorrió la distancia entre Atenas y Maratón él
solo. Lo menciono como uno de esos hechos que pueden ser atractivos o
interesantes.
A pesar de que tenía a Murakami en el dique seco por
culpa del libro que me regaló Marisol hace muchos años, he de reconocer con
placer que la lectura de este libro me ha gustado mucho y la he disfrutado,
casi casi, como si yo hubiera conseguido todo lo que él relata que ha hecho.
“La existencia de una máxima
que dice que un auténtico caballero nunca habla de las damas con las que ha
roto, ni de los impuestos que ha pagado es..., es una mentira como una
catedral.”