domingo, 24 de julio de 2011

Thomas Pynchon: El arco iris de gravedad (*)

(1.148 pág., leídas 575; Tusquets)                       (55; diciembre de 2010)
            Supe de la existencia de este autor por la contraportada de La broma infinita (libro número 1 que leí en 2009). En ella un crítico lo comparaba a Pynchon: “… piensen en Pynchon. Piensen.”. Y exactamente eso es lo que estuve haciendo durante casi todas las 575 páginas de las más de mil cien que tiene el libro. Estuve pensando porqué seguía leyendo un libro que no entendía de qué iba y que no me hacía ninguna gracia. Me forcé a llegar a la mitad y punto.
            Sí que tenía razón el mencionado crítico, pues mientras leía La broma infinita también me sucedió lo mismo, pero en aquella época leía muy de tanto en tanto por lo que perdía el hilo de lo leído, pero hacia la mitad, el libro se hizo “coherente”. Y eso no le pasa a este.
            Los dos primeros capítulos, de unas cuatrocientas páginas son ininteligibles. Creí que el tercer capítulo, que tiene unas quinientas, ya entraría de lleno en el tema, pero no es el caso.
            Lo que sí es el caso, es que cualquier sinopsis del libro no puede ser representativa del mismo. Cuando leí Ulises de Joyce (cuando era mucho más joven y, seguro, que no entendí todo lo que se quiere dar a entender) disfruté; con La broma disfruté en los últimos capítulos; con este me aburrí soberanamente.
            Las dos referencias siguientes explican mucho mejor que yo lo que quiero decir. La primera es una explicación ligera, la segunda más literaria. En cualquier caso vale la pena leer ambas y pasar de “pensar en Pynchon”. (A mi pesar, quiero leer La subasta del lote 49 y sacarme esta espina).



“Llega un grito a través del cielo.”

eBook: sí.                              lolabits


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